Autor: Lidia Lewczuk Masalyka
Estos días medio ausente pasando los días de aislamiento por COVID-19, sin muchos deseos de hablar, de leer, hasta sin ganas de ver una buena película. Esta plaga produce un desgano, y falta de fuerzas- dentro de todo fue bastante pasable, estoy en el décimo día esperando el alta.
Pero me sobró tiempo para pensar… y me preguntaba—el Estado dice que me cuida… ah, si…. si fuera una persona sola, sin celular, sin que alguien me lleve a hacer hisopado o lo peor internarme? y Si….fuera una vecina mal llevada que no me haría ni un favor, como comprar unas verduritas? y si…y siii… donde está el Estado?
Pero esta pandemia me enseñó a valorar aún más a la Iglesia de Cristo como su Cuerpo. Ha sido el rocío de Hermón en estos días con sus incontables oraciones y mensajes de ánimo, ha sido la fragancia del Sacerdote trayendo paz- nuestros médicos pendientes de mi salud cada día, hermanos que dejaban tras las rejas bolsas de verduras, frutas, carne (y de la buena!!!!!) tortas, masas, sopas, pollo con papas fritas, y no les comento más porque se van a poner envidiosos (chiste) Lástima que al perder el sabor no se disfruta tanto.
No es en vano que el salmista escribió ¡Cuán bueno y delicioso es habitar los hermanos juntos y en armonía porque allí envía el señor bendición y vida eterna…..
No solo a nosotros la iglesia ha cuidado, sale por las noches a los refugios y hoteles a llevarles no cualquier sobra, al contrario buena comida caliente nutritiva. El estado que haga lo que tiene que hacer, pero te aseguro, que la que te cuida es la iglesia. Por eso es tan importante que te congregues, que formes vínculos de amor y amistad, que hagas conocer tus necesidades (nadie es adivino) que pongas tus dones al servicio del Señor, que es justamente la interacción de los miembros ayudandándose mutuamente, para que el cuerpo crezca saludable.
A todo el Centro Cristiano, mi amada iglesia, a los anexos que se plantaron y pastores amigos, que oran siempre, a los amigos de lejos, misioneros que se interesaron… ese rocío y frescura del Hermón, Dios les bendiga con salud y libertad de toda enfermedad y plaga
Sé que este sentir también es del pastor Juan y de todo corazón les agradecemos cada detalle como mimo de nuestro Dios.